* (1) -> Tú
* (2) -> Tu mejor amiga.
* (3) -> Tu JUMP favorito
* (4) -> El JUMP favorito de tu amiga.
Capitulo 6: Desastre
-(3)-kun, ¿estás ahí?- pregunto (1), abriendo la puerta de
la habitación de su novio. Dentro de esta vio algo que la dejo sin aliento.
Estaba (3) besándose salvajemente con una chica que no había visto en su vida.
-(1)…- susurro el moreno, acabando el beso con la otra y
mirándola directamente.
-Te odio…- dijo en voz baja, apretó los puños con fuerza,
cayéndole las lagrimas que no podía contener.-¡TE ODIO!- salió otra vez de la
habitación dando un portazo y bajando las escaleras, oyendo como el chico le
llamaba desde el piso de arriba.
-¡(1)!- salió por la puerta principal, dándole de lleno un
frio helado y eso que iba abrigada hasta en los pies. -¡(1)!
Abrió los ojos de golpe, encontrándose con su amiga a unos
centímetros de su cara, se separo de ella y se desperezo, intento taparse un
poco con el futon pero no encontró la manta.
Se sentó y lo busco con la mirada, miro a su amiga como guardaba el suyo
en el armario cuando otra oleada de aire helado le puso la piel de gallina, y
fue entonces donde vio la ventana abierta y el futon a un lado.
-¿Pero qué…?- se levanto y se dirigió hacia el.- ¿Cómo ha
llegado hasta ahí?- lo cogió una milésima de segundo y luego lo soltó de lo
congelado que estaba.
-Pues no sé, al ver que no te despertabas…-saco de su
bolsillo su teléfono móvil, lo desbloqueo y sonrió.- Que tierno que es (3). Te
manda un mensaje nada más empezar el día.
-¡Trae eso aquí!- le ordeno con un sonrojo, al ver que su
amiga no le hacía caso y aparte ya sabía que había leído el mensaje, corrió detrás de ella hasta
cogerla y quitarle el móvil.
-Ósea que no me cuentas las cosas…- bajo la cabeza
haciéndose la víctima y se acurruco en una esquina.
-¿Pero qué haces, tonta?- se la quedo mirando con una ceja
alzada y bajo la vista hacia el mensaje.
“Espero que haigas dormido bien y se te haiga pasado el dolor de
cabeza. Espero que no te haya despertado, pero me hacía ilusión que te
despertaras con uno de mis mensajes. No sé si te acuerdas pero ayer te dije que
te quería llevar al zoo, espero que no haigas cambiado de idea, te iré a buscar
a las 16:00. ¡Nos vemos!”
Apretó la tecla de volver a inicio, pero aun así se quedo
mirando la pantalla por unos minutos más, hasta que su amiga, al ver que no le
hacía caso y seguía ahí parada, se levanto, se acerco a ella, le paso varias
veces la mano por delante y después le dio un suave empujón.
-¿Estás ahí?
-¿Eh? ¿Eh? ¿Qué hora es?
-Pues las 11, hace un cuarto de hora.- sonrió después de
mirar el reloj.
-Ja, ja… Que graciosa.
-Te llamaba tu amiga, parece que tienes bastante trabajo.
-¿Enserio?- pregunto un poco deprimida.
-Pues si, así que si quieres quedar con tu amor, ya puedes
espabilar.
(1) se paso el resto de la mañana haciendo entregas,
mientras (2) se quedaba en el mostrador cubriendo a la dueña, que había
tenido que salir a una reunión.
La ultima estaba leyendo una revista tranquilamente cuando
el pitido de la puerta al abrirse hizo que mirara hacia allí.
-Hola, bienvenido a…- delante de ella estaba (4), que se
había quitado las gafas de sol.- ¿Qué haces aquí?- le pregunto, saliendo del
mostrador.
-Pasaba por el barrio y me encontré con la tienda, y ya que
estoy, mirare algo. ¿No llego hace poco la colección de libros que pedí?- dio
un pequeño recorrido con la mirada por la tienda y camino unos pasos hasta
ponerse delante del único ordenador que había.- ¿Me lo puedes buscar?
-Ah, claro.- sonrió y tecleo varias veces.-Pues, se supone
que ya tendrían que haber llegado. Supongo que estará en el trastero con las
otras entregas.
-¿Puedes ir a mirármelo?- le rogo.
-Claro, solo espera aquí.- entro por la puerta trasera,
oyendo desde donde estaba el chico como bajaba las escaleras. -¿Hay alguien
ahí?- Pregunto al aire al apagarse las luces. Sintió una mano como le agarraba
de la cadera, empujándola hacia el lugar más oscuro, mientras que con la otra
le tapaba la boca. La chica empezó a forcejear, pero al ver que el que la tenía
presa era más fuerte que ella, empezó a dar golpes contra la pared. Oía como la
persona sacaba algo de algún bolsillo por que se oyó el sonido de una
cremallera, haciendo que esta se asustara y empezara a llorar.
(1) estaba haciendo la última entrega cuando un coche se
paro justamente al lado de la acera por donde ella caminaba.
-¿Quieres que te lleve a alguna parte?- pregunto (3),
bajando la ventanilla del conductor.
-Ah, hola.- sonrío (1). -¿Qué haces por aquí?
-Bueno, si te montas a lo mejor te lo cuento.- palpo el
sitio del copiloto.
-¿Y bien?- siguió preguntando ya sentada a su lado, un poco
incomoda, pero feliz al estar una vez más a su lado. Él puso el coche en
funcionamiento.- ¡Oh! Aun tengo que hacer la última entrega.-le aviso.
-¿Dónde queda?- ella le indico las calles que tenía que
seguir hasta que llegaron a la casa. Dejo el paquete y volvió a meterse en el
coche.- Bien, ahora sí que podemos hacer lo que había planeado.
-¿Me vas a llevar al zoo?- pregunto ilusionada. El chico
pasó el brazo por delante de ella, cogió el cinturón y se lo puso. Ante esto
ella se sonrojo, poniéndose tiesa y mirando por la ventana.
-¿Vamos?- pregunto con una sonrisa burlona. La otra afirmo
con la cabeza.
-¿Hay que dejar el coche tan lejos?- suspiro (1), al ver a
lo lejos un gran cartel dándoles la bienvenida.
-Más adelante no debe de haber aparcamientos.-Cerro con
llave el coche y comenzó a caminar siguiendo hacia donde se dirigía toda la
gente.-Nos toca caminar.
-Qué remedio.- se abrigo más con la chaqueta y corrió hasta
ponerse a la par con (3).
-¿Y bien? ¿Qué quieres ver primero?- le pregunto el moreno.
-Mmm…- se quedo un rato pensativa hasta que vio uno de los
carteles informativos que les decía los horarios para cara actuación.- ¿Y si
empezamos por los koalas?
-¿Te gustan los koalas?
-Sí, ¡son súper adorables!
-Bueno, como el zoo es muy grande, ¿Qué tal si primero damos
una vuelta en el mini bus y después vamos a verlos?
-¡Vale!- sonrió (1).
Ambos corrieron a la parada de bus que más cerca tenían,
pillando con suerte el último que pasaba. Normalmente el parque era tranquilo,
pero ese día estaba lleno de coches y camiones, era gente importante que
llevaba el negocio. Los camiones transportaban la comida y lo que iban a
utilizar durante las actuaciones, tanto con los delfines que con cualquier
animal.
-Da una vuelta muy larga, ¿no?- dijo (1), al ver de nuevo
su reloj. Había pasado media hora desde que habían subido.
-El zoo es muy grande, creo que te tendré que traer más de
una vez para que puedas verlo entero.- (3) estaba agarrado a una de las barras
que tenían los autobuses para que la gente se agarrara, estando casi pegado a (1).-Mira, esta es nuestra parada.- agarro bien la bolsa que llevaba y se puso
en posición de salir, (1) hizo lo mismo.
Justamente cuando la chica estaba a punto de salir, un
camión se abalanzo sobre ella, rozando el autobús y rompiendo la puerta,
haciendo que todos los cristales salieran disparados hacia ella, pero (3) fue
más rápido y la tapo con su cuerpo, llevándose varios rasguños en los hombros y
algunos trozos de cristal se le clavaran en la espalda.
-¿Estás bien?- le pregunto ella, apartándose de él.
-Si.- se quito la camisa y se limpio la sangre de los
hombros.
-¡No hagas eso!- lo empujo fuera del autobús al ver que no
venia nadie y lo sentó en uno de los bancos, cerca de los baños. –Espera aquí,
no te muevas.- entro deprisa en el baño de hombres, vigilando por si había
alguien. – ¡Bien!- volvió a donde estaba el chico y lo llevo arrastras al baño.
-Como nos pillen, ya verás la que se armara.
-No nos pillaran.- lo metió en uno de los retretes y cerró
la puerta. Saco un gran rollo de papel y volvió a salir fuera, lo mojo, y
volvió a entrar.-Estate quieto- El chico se empezó a mover un poco incomodo por
la posición que estaba con ella. El estaba sentado en la tapa del retrete,
mientras que la chica estaba entre sus piernas inclinada hacia él. No pudo
evitar mover un poco la vista hacia su escote, pero ella estaba tan concentrada
en curarle la herida que no se daba cuenta ni de la posición ni de lo que
pasaba.- ¿Te duele?- le pregunto al verlo tan callado.
-¿Eh?- dijo apartando la vista.-Oh, no, tranquila.- Ella
siguió pasando el papel mojado por la heridas cuando oyó varias voces. (3) de
inmediato le tapo la boca.
-¿Está ocupado?- pregunto la voz desde el otro lado de la
puerta.
-¡Sí!- contesto (3). Continuaron en la misma situación
hasta que los chicos se fueron.
-Que susto…- suspiro aliviada. El moreno la empujo un poco
para ponerse el de pie, se volvió a poner la camisa y vigilando que no les
viera nadie salieron otra vez a la calle, agarrándola de la mano.
-¡Vamos a ver los koalas!- grito emocionado, corriendo un
poco, haciendo que la otra hiciera lo mismo.
genial! ya quiero ver a los koalas!!!
ResponderEliminarMe encantó :D me gusta mucho, espero ansiosa el segundo uwu
ResponderEliminarSiguiente* no segundo jajaja :)
Eliminarque intensooo!! pero quién era la persona del sótano?... continua por favor :D
ResponderEliminarpor favor siguelo! esta muy bueno! y quiero saber como sigue lo del sotano >///<
ResponderEliminargambatte ♥
conti conti conti conti conti.....!!!!
ResponderEliminarpor favor pon la conti q lindo q esta :')
porfa conti conti conti conti......!!!!